Una joya etnográfica de nuestro patrimonio cultural inmaterial.

«Los Mayos» son una efemérides de gran atractivo turístico en nuestra Sierra de Albarracín y se erigen como «canciones populares de cortejo».

La festividad de «Los Mayos» es una fiesta popular de origen ancestral para celebrar la llegada de la primavera. Su origen se remonta a griegos y fenicios, y los romanos también los adaptaron. En la actualidad, son cantos o rondas a la persona amada; y el cristianismo, añadió además un enfoque o exaltación religiosa a nuestra Virgen María.

Todo comienza la noche del 30 de abril…

Primero se eligen LAS MAYAS ; y, para ello, los mozos se reúnen en la puerta de la Iglesia para hacer la elección. Así pues, es un ritual de emparejamiento de mozas y mozos «casaderos» locales. Dependiendo de los pueblos o municipios, este emparejamiento se hacía por SORTEO o SUBASTA.

A los mozos y mozas emparejados se les llama MAYOS y comienza, entonces, una relación que durará hasta la noche de San Juan (23 de junio). Durante todo ese tiempo, existen unas OBLIGACIONES que deben preservarse:

1) De esta manera, el MAYO ha de rondar a su MAYA; y, por ello, han de iniciar los bailes los domingos en la Plaza.

2) Asimismo, los MAYOS deben preparar sendas ENRAMADAS DE FLORES para engalanar las balconadas de sus respectivas MAYAS.

3) Finalmente, y el día de San Juan (23 de junio), concluyen los compromisos y los MAYOS quedan libres de toda obligación; o, por el contrario, continúa el NOVIAZGO y CASAMIENTO.

Queremos agradecer profundamente desde aquí la extraordinaria labor de recuperación y divulgadora de esta costumbre o tesoro de nuestro Patrimonio Cultural Inmaterial a la ASOCIACIÓN BERNADO ZAPATER y a nuestra RONDALLA DE ALBARRACÍN. Sin ellos, esta festividad habría caído en el olvido. Gracias de corazón.